Filosofía

Una antigua fortaleza rica en historia y cultura donde acogemos máximo 12 huéspedes, hemos optado de actuar como intermediario entre los huéspedes y el territorio dándoles la oportunidad de descubrir y redescubrir el placer de una estancia relajante, el campo en los sabores, en las tradiciones, en los cultivos típicos, en la historia; de recobrar una dimensión del tiempo ya perdido, en cual la tranquilidad y el silencio son el valor añadido de una vacación para no olvidar


Nuestro agroturismo hace parte del proyecto “huéspedes de valor” de la provincia de Siena que promueve la sensibilización por parte de los huéspedes de las tierras senesas con respecto al consumo de energías y les propone de compartir el respeto y el conocimiento de tradiciones y estilos de vida locales para sentirse parte integrante de la comunidad y vivir una verdadera experiencia de vida del lugar. Además ponemos particular atención a la sostenibilidad, entendida como protección del ambiente en todas sus formas. La organización de la empresa ha sido realizada siguiendo lo más posible métodos naturales (ej. fitodepuración para la recuperación de las aguas refluentes). Nuestra estructura, ocupada en la obra social de respeto y civil convivencia trata a todas las personas al mismo modo y sin prejuicios, es gay-friendly.  
 

Por elección hemos querido dejar a los dormitorios la finalidad de lugar de descanso y a disposición de nuestros huéspedes no hay televisores sino libros en muchos idiomas de los que poder disponer durante la estancia. 


Un verdadero lujo de unas vacaciones en la campania en nuestros tiempos?
El ocio o tiempo libre entendido como un estallido latino proveniente del tèrmino “otium”, la delicia de no hacer nada que  contrasta al “negotium” espacio de tiempo que por fuerza se dedica a las obligaciones y encargos materiales.Luego la posibilidad de gozar los amplios espacios vitales, de dividir con pocos previlegiados.Un lugar donde se puede meter en juego los sensos muchas veces ignorados en el diario vivir.Afinar el olfato con los perfùmenes de la campania en el cambio de las estaciones., por un momento interminabile cruzar la mirada de un ciervo y enseguida cambiar panorama acariciando con nuestros ojos pequenios paraisos habitados, cultivaciones de uvas y olivas , bosques y màs allà...., sin lìmites, provar frutos apenas recogidos del àrbol y encontrar aquel sabor que desde hace tiempo no lo saboreabamos.  Acariciar con la mano una vieja mesa de trabajo y poder imaginar la labor realizada por aquellas manos antiguas.  

 

El sonido del silencio en la noche que nos gratifica y nos reconcilia con nosotros mismo.